Laboratorios de experiencia

Tiendas híbridas con más de un propósito, que sirvan de engagement para que los consumidores vuelvan a visitar las tiendas físicas.

La pandemia está forjando nuevos modelos de tiendas híbridas con más de un propósito: ofrecer productos y servicios atractivos que sirvan de engagement con los consumidores y vuelvan a visitar las tiendas físicas después del confinamiento. Por poner un ejemplo, en el sector de la cosmética, son los propios consumidores los que se han convertido en altavoces de la marca a través de sus contenidos caseros a modo de reviews y recomendaciones. El nivel de profesionalización ha llegado a tal punto, que algunas apuestan por convertir sus tiendas en platos audiovisuales, especialmente pensadas para la creación de contenido de la mano de sus clientes. La tienda más que un espacio de compra, es un lugar donde generar conexión con la marca y experimentar el producto a través de nuevos lenguajes comunicativos.

Drivers del cambio

El papel de la tienda se está redefiniendo en medio de los impactos de la COVID-19. Solo en EEUU, más de 15.000 espacios comerciales corrieron el riesgo de cerrar en 2020, superando con creces el récord de 9.548 cierres de 2019 (Fuente: Coresight Research).

En este contexto de omnicanalidad, la tienda se convierte en un punto de contacto (físico), que permite la venta a través de plataformas tecnológicas. La tienda asume la función de showroom y se finaliza el proceso en el e-commerce, lo que supone reconsiderar cuál es el propósito de la tienda física. El gran reto no está ahora únicamente en crear un e-commerce, sino en conseguir que la experiencia entre físico y online estén conectadas y sea coherente. Los showrooms deben impulsar el deseo de estar ahí para los compradores —en lugar de una necesidad—, ya que el viaje del cliente se desplaza cada vez más a Internet.

«Una vez se supere la preocupación por la salud y la higiene ocasionada por el COVID-19, las tiendas físicas volverán a ser vitales, pero menos para la distribución de productos y más como canal de comunicación para la marca».
Doug Stephens, fundador de Retailprophet.com.

La consecuencia

Las tiendas seguirán siendo espacios de compra, pero cobrarán mayor importancia como lugares para entrar en contacto con la marca y sus valores. De esta manera, adoptan nuevas funcionalidades como en el caso de la cosmética que está apostando por platós-estudios de grabación en colaboración con influencers sociales relevantes para su sector. Más allá del servicio, el personal podrá utilizar estos espacios para influenciar a los posibles compradores a través de los canales digitales, renovando la figura del vendedor tradicional a un embajador de la marca. Tiendas como espacios de reparación y reacondicionamiento y más orientadas a los servicios y a la prescripción que a la propia venta serán modelos habituales en una realidad del comercio omnicanal.

Las claves del diseño

Espacios comunicables

Interiores fotogénicos especialmente pensados para provocar que sean los propios clientes quienes se conviertan en altavoces de la marca.

Interiorismo conectado con el negocio

Interiorismo conectado con el negocio Cada vez más a la hora de proyectar un interior de tienda, la disciplina se vuelca a entender el negocio, para dar soluciones estratégicas que construyan junto al cliente una nueva lógica de transacción.

Conectar con el cliente

La tienda va más allá de la muestra de los productos y debe conectar con el cliente a través de actividades y pasiones comunes. Tiendas convertidas en pasarelas, espacios de trabajo, peluquerías o estudios de grabación son algunas ideas que insignias de todo el mundo están desarrollando.

Flexibilidad

La tienda se convierte en un espacio transformable con capacidad de cambiar su función según la hora del día. Las soluciones constructivas ligeras que permitan modificar.

Case studies

 
01
La segunda Tienda Freshly Cosmetics diseñada por CuldeSac, consigue traducir el ADN de la marca en un espacio real. Las curvas por todo el espacio reflejan la personalidad de la marca, juvenil y fluída. La tienda, de 150 m2, cuenta con puntos de encuentro para cargar teléfonos o ver proyecciones de pared, elementos incluidos para fomentar la interacción.

 
02
Definido por sus diseñadores como “un monasterio moderno para la ciencia del ciclismo”, los HQ de United Cycling, en Lynge, Dinamarca, más que como una tienda se entienden como una experiencia retail, ya que incluye una librería, una sala de eventos, un training hub, un laboratorio de innovación y además, se pueden comprar bicicletas. Fotografía: Alastair Philip Wiper.
04
Diseñado por Collective B, la tienda de la marca cosmética Villa de Mûrir para The Cell Company consta de cuatro zonas en dos plantas, incluyendo una tienda multimarca Beauty Select, un puesto de maquillaje, una cafetería y un estudio de producción de contenido para los beauty bloggers de YouTube. Equipo: Dongwook Kim, Yoonjin Lee, Seokmi Hong, Taesoo Kim, Minjeong Choi. Fotografía: Young Kim_Indiphos.
05
La marca de aseo para hombres Old Spice ha abierto su primera barbería física, proporcionando a los consumidores una experiencia inmersiva a partir del propio contenido que los clientes generan, integrando así nuevo modelos de negocio como estudio de contenidos digitales y laboratorio de pruebas para nuevos productos tradicionales de barbería.

Descubrir más

03
Virgil Abloh y los arquitectos OMA diseñaron el buque insignia de Off-White, Off-White Flagship Store Miami, en el Design District de Miami como un espacio ajustable y transformable en el tiempo. La tienda, de dos plantas, cuenta con una pared móvil en la planta baja, que puede replegarse, mientras que todo el mobiliario se coloca sobre ruedas o es plegable. Estos elementos de diseño modificables permiten transformar todo el espacio de la tienda para poder dar cabida a diversas actividades o eventos. Equipo: Samir Bantal (director AMO), Valentin Bansac, Fabrizio Esposito. Fotografía: Kris Tamburello, cortesía de Off-White.